El cáncer es una de las enfermedades más temidas que existen. De hecho, se incluye en las tres Ces que más muertes ocasionan. cáncer, corazón y carretera. Ahora habría que añadir una cuarta Ce, el coronavirus. Amén del evidente daño físico al enfermo, en algunos tipos de cánceres se une el daño psíquico. En especial el cáncer de mama menoscaba la autoestima de la mujer. Pese a seguir siendo una persona tan maravillosa como lo era al estar sana. Por eso son necesarios gestos de solidaridad. Todo el mundo desea verse arropado y querido. Tanto enfermos como sus allegados que también padecen las secuelas en forma de sufrimiento, de angustia por no poder hacer nada. La Real Federación Española de Fútbol ha querido tener uno de esos gestos.
Como suele ser habitual en los últimos años, el fútbol español se ha solidarizado con las enfermas de cáncer de mama.
Así, al inicio de la concentración de la Selección española femenina, las internacionales de Jorge Vilda mostrarán su apoyo a todas las personas que sufren esta enfermedad. También a quienes trabajan para lograr vencerla, a través de la prevención y de la investigación.
El lunes, al inicio de la concentración en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, de cara a los compromisos ante Marruecos y Ucrania, las jugadoras entrenarán con balones rosas. El martes, Día Mundial de la lucha contra el Cáncer de Mama, la RFEF presentará los llamados pañuelos solidarios, que se han realizado con las camisetas de la Selección española. Estos forman parte del denominado Reto Pelayo Vida.
También la Selección masculina entrenará en su concentración con petos y balones rosas.
La Real Federación Española de Fútbol quiere mostrar su solidaridad durante toda la semana entrante con las enfermas de cáncer de mama. Loable iniciativa, sin duda alguna, así como necesaria.
Para finalizar, permítannos hacer una reflexión. El ser humano es enormemente solidario. Ante enfermedades, catástrofes y demás desgracias. Las buenas personas, claro está, lo dan todo por ayudar a sus semejantes. Lo hemos visto en los telediarios, en distintas noticias de diversas connotaciones y en diferentes países. Por desgracia, el olvido es tan inminente como la solidaridad. Deberíamos estar al lado de quien lo necesita los 366 días del año. Esa es la asignatura que debemos aprender todos los seres humanos. También quien escribe este artículo, por supuesto.
Autor: Luis Fernando Ramos
Fotografía: RFEF