El Espanyol de Salvador Jarque sigue en caída libre y en el fondo del pozo de la clasificación de la Liga Iberdrola, siendo el único resultado positivo de esta temporada el empate logrado hace un par de semanas en casa frente al Betis. Volvía a la Dani Jarque después de la goleada encajada la semana anterior en Sevilla, con la necesidad ya no sólo de puntuar, sino de sumar de tres en tres aunque los augurios no eran los mejores porque recibía en la Ciudad Condal a un histórico del fútbol, el Athletic de Bilbao, que tenía una dinámica de resultados positivos.
Saltaron ambos conjuntos con algunas novedades en su once. Del cuadro blanquiazul debutaba en el equipo la cancerbera del filial Montse, tras las lesiones que bajo palos arrastra el conjunto local, con Mimi lesionada en el partido del Betis, la lesión de hace semanas de Mariajo y los problemas burocráticos de Kaeli, al añadido de un partido no demasiado acertado de Janet en Sevilla, provocaron un nuevo debut, la cuarta cancerbera en ocho jornadas. Del cuadro vasco, con las lesiones de Nekane e Ibáñez, y con una Lucía García cogiendo la forma tras su lesión, su entrenador Ángel Villacampa introducía a Valdezate en la medular para hacer de pareja de baile de una sobresaliente Damaris.
El primer tiempo fue claramente de las centrocampistas de ambos conjuntos, con el balón viajando demasiado tiempo por el aire sin tener un control claro por ninguno de ambos equipos, de hecho las porteras fueron más iniciadoras de juego que el destino de los balones del equipo contrario, y es que por el lado blanquiazul no se conseguía trenzar jugadas que dieran continuidad al balón hacia las zonas de finalización donde se genera el peligro y se pueden conseguir goles, necesarios para esa victoria que tanto necesita el conjunto dirigido por Salvador Jaspe. Mientras, del lado de las leonas, el conjunto de Villacampa buscaba atraer el juego y la presión contraria hacia la zona del balón para desplazar en largo en cambios de orientación para dar ventaja a la velocidad de sus jugadoras de ataque, aunque el acierto en ese plan concebido desde el banquillo no era el idóneo para crear un peligro real frente al marco de Montse, en todo momento centrada en seguir muy concentrada el juego y deteniendo dos balones de sendos disparos del cuadro visitante.
Cuando todo presagiaba que las tablas serían el marcador con el que se llegaría al descanso, llegó el primero de los grandes errores del partido. En una acción de salida de balón de la defensa visitante, Eli del Estal conseguía interceptar el balón y cederlo a Ayaka que entraba en carrera de segunda línea, quien después de quebrar con mucha habilidad a la zaguera bilbaína, era derribada señalando la pena máxima la colegiada María José Villegas. El cuadro bilbaíno reclamó la acción, no por la claridad de la falta cometida, sino por la ubicación de la misma considerando que la acción de falta había sido fuera del área y no dentro como había señalado la colegiada del colegio andaluz. El penalti sería transformado muy hábilmente por Eli del Estal que con este lograba el primer gol de la temporada, un dato más que demuestra la falta alarmante de gol del cuadro perico.
Llegaba por fin una buena noticia para el conjunto local que, al contrario de lo que sucediera contra el Betis, esta vez sí consiguió llegar al descanso manteniendo la ventaja. Pero nuevamente, como viene sucediendo también a lo largo de la temporada, le sentó mejor el descanso al cuadro visitante que no al del Espanyol. Y es que cierto es que el conjunto blanquiazul tenía esa ventaja en el electrónico y conseguía mantener el balón, jugarlo aunque sin peligro pero tampoco sin sufrirlo. Pero en una falta de tensión defensiva, algo que no debería de suceder, las leonas consiguieron igualar el tanteo con un gol de Lucía García, quien había recibido un pase al espacio tras el robo y superaba la estirada de una vendida Montse que nada pudo hacer frente al excelente disparo cruzado de la internacional española.
Y con ese tanto en contra volvieron a aparecer los miedos que persiguen a los equipos con dinámicas tan opuestas. Se les veía en la cara que llegaba el Deja Vu de lo que se lleva disputada esta pretemporada y de una cosa se pasó a otra y en un balón largo, de los que andaba buscando el cuadro bilbaíno toda la temporada, aparecido el segundo gol de Lucía García quien marcó a placer tras aprovechar una excelente asistencia de Yulema Cortés.
A partir de ahí, los miedos, como que quema el balón en las botas de uno y se lo cede al otro, y con ello la ausencia de capacidad del Espanyol para recuperarse, un equipo que volvía a tener dificultades para sobreponerse a situaciones adversas. Por su parte, el cuadro visitante empezaba a enlazar las jugadas de ataque que le permitía llegar con opciones frente al marco de Montse, pero realmente de forma estéril porque Montse seguía muy fina cara a evitar la sentencia definitiva del encuentro.
El Espanyol era el quiero pero no puedo con una alarmante falta de juego combinativo, con una gran deficiencia que es necesaria para lograr cuáles, es tener un plan de ataque que le impedía llegar más allá de zona de tres cuartos sin provocar ansiedad en la zaga defensiva.
El Espanyol deberá afrontar una semana difícil, y es que no acompaña ni el resultado ni tampoco el juego, y se verá hacia dónde se debe de dirigir el timón de este barco.
En rueda de prensa, tanto Villacampa como Jaspe destacaban como un aspecto muy importante del juego, las dinámicas y las diferencias que existe entre ambas y la dificultad de salir de ellas, en parte porque van y vienen sin que haya muchas veces explicación de ello.
Salvador Jaspe sigue manteniendo que “yo me veo totalmente capacitado para tirar esto adelante, he vivido situaciones peores en mi vida profesional y el año pasado cuando vine estábamos peor, y este año estamos hablando que estamos en la jornada 7, hasta el último partido lucharé para que esto salga adelante y así lo hemos hablado con los responsables de la entidad al acabar el partido”, añadiendo que “las jugadoras están jodidas como yo, pero estamos todos juntos y ellas están convencidas que quien tiene que sacar esto adelante soy yo” y que “este equipo no merece la posición en la que se encuentra y no se han hecho mal las cosas como para estar debajo de todo con sólo un punto”.
Villacampa reflexionaba sobre que “en el primer tiempo hemos estado ambos equipos sin generar demasiado porque a nosotros no nos acaban de salir los planes de los encuentros, no ganábamos duelos y la transición con lo que buscábamos era más lenta”, para centrarse en el segundo tiempo “creo que tras el descanso y los ajustes hemos empezado a llevar a cabo nuestro plan de atraer para buscar el balón largo a la espalda de ellas para aprovechar la velocidad de nuestras jugadoras y hemos conseguido tres puntos muy importantes en un campo muy difícil”, para acabar con una valoración del equipo “aún no es el Athletic que espero construir, las victorias te dan esa confianza para que las jugadoras se atrevan con más cosas, pero aún queda terreno por recorrer para ver ese Athletic que pretendo”.
En cuanto a Damaris que comparecía también en sala de prensa la misma reconocía que “el primer tiempo nos ha costado, no conseguíamos las ventajas que buscábamos con la velocidad de nuestras jugadoras de ataque” y coincidía con su técnico en el hecho que “en el segundo tiempo sí que hemos sabido llevar a cabo lo que buscábamos y al final hemos logrado la victoria que nos permite seguir en esa dinámica positiva de resultados de las últimas semanas”.
Del cuadro local, la goleadora del día, Eli del Estal, insistía en la misma línea que su entrenador “el vestuario está muy unido y confiamos plenamente en todo el cuerpo técnico para revertir esta dinámica que no sabría explicar a qué se debe porque durante la semana se trabaja mucho, hay intensidad”, recalcando en cuanto a su gol a la vez que a la falta de ocasiones generadas por el equipo que “cuando marco goles es gracias al equipo que me hace llegar balones, pero si no llegan es difícil marcar, y el trabajo defensivo que se ha hecho, con excepción de dos errores puntuales ha sido brutal, pero nos cuesta llegar al último tercio de campo”.
Veremos los acontecimientos de esta semana en el Espanyol, con una sola jornada por delante antes del nuevo parón de selecciones y en lo que podría ser la última jornada antes de la huelga anunciada por las jugadoras para la jornada 9 del 16 y 17 de noviembre. El cuadro perico se desplaza a Madrid para jugar contra el Rayo y veremos cómo avanza la semana.
FICHA TÉCNICA:
RCD Espanyol: Montse, Paola Soldevila (Yiyi 75’), Inés Altamira, Brenda Pérez (Ainhoa Marín 55’), Dulce (Elba Vergés 50’), Anna Torrodà, Ayaka Noguchi, Katherine Alvarado (Letti 67’), Débora, Eli del Estal y Elena Julve.
Ath. Bilbao: Andrea de la Nava, Eunate, Vanesa Gimbert, Grazi, Moraza (Oihane 60’), Damaris, Marta Unzué (María Díaz 87’), Valdezate (Marta 46’), M. Oroz, Lucía García y Azcona (Yulema Correa 46’).
Goles: 1-0 Eli del Estal (p) 43’, 1-1 Lucía García 53’, 1-2 Lucía García.
Colegiada: María José Villegas Navas (colegio andaluz).
Asistentes: Sandra Alcoba y Sonia Linares (colegio andaluz).
4ª árbitra: Paula Regola (colegio catalán).
Autor: Enric Solé Altarriba
Fotografía: Jordi Vinuesa