Por fin, tras meses de negociaciones en los cuales hubo un enorme revuelo en las redes sociales, la gran Natalia Pablos podrá retirarse del fútbol. Esta gran profesional quería que el Rayo Vallecano le diese vía libre para dejar el balompié, por cuestiones personales. Sin embargo, el club rayista, o mejor dicho la testarudez y corta de miras de alguno de sus dirigentes, no le permitía satisfacer ese deseo a menos que pagase la cláusula de rescisión (25000 euros). Como es normal, tamaña cantidad de dinero es difícil de sufragar para una futbolista que gana un salario de mileurista, en algunos casos incluso menos.
La situación estaba encallada, pero pudo más la presión social y, finalmente, cuando el club vallecano fichó a la delantera venezolana Oriana Altuve, las negociaciones entre Natalia y el Rayo llegaron a buen puerto y la ya ex jugadora franjirroja ha conseguido la ansiada carta de libertad. Tres meses después de empezar el conflicto.
Natalia Pablos ha marcado 350 goles en los 380 partidos disputados a lo largo de su dilatada carrera profesional. Ha conseguido ganar una liga, una Copa de la Reina, una Eurocopa Sub 19 y, sobre todo, ha sido un espejo donde cientos de niñas han podido mirarse y desear ser como ella. Muchas de las cuales, a buen seguro, nos están dando grandes alegrías con la selección en las categorías inferiores.
En ocasiones un equipo debe ser un poco condescendiente con las jugadoras que, como es el caso de Natalia Pablos, han sacrificado su vida en pos de su equipo y han dado tanto al club. El dinero no lo es todo. Las leyendas se forjan y Natalia es y será leyenda viva del Rayo Vallecano. Quizás en un futuro la veamos entrenando. El tiempo lo dirá.
Autor: Luis Fernando Ramos
Fotografía: Lorena Peña