Los primeros pasos de la UD Collerense femenino fueron en los años 1999-2000, por aquellos tiempos jugaba la liga regional en Mallorca. En su primer año quedaron en la sexta posición. Un curso después consiguió ser terceros, hasta que a la tercera fue la vencida y tres años después logró el ascenso. A partir de ese momento jugó en el Grupo 3 de Primera Nacional, por aquel entonces la segunda categoría del fútbol femenino español. Todo el trabajo parecía tener recompensa. Para la poca creencia de algunos, la UD Collerense empezaba a ser una referencia en el fútbol balear.
Un sueño cumplido
El club aterrizaba en la categoría de plata que fue su casa durante siete años, compitiendo con auténticos titanes como el FC Barcelona. Seis subcampeonatos hasta que en la temporada 2008/2009 el sueño empezaba a ser una realidad. El conjunto balear se proclamó campeón de Liga de forma brillante, ganando todos y cada uno de los encuentros disputados. El esfuerzo obtuvo premio y por primera vez el equipo pudo participar en el ascenso a la Primera División, la llamada Superliga.
Llegaba la hora de rematar el sueño, el momento más deseado. En la primera fase el equipo venció de manera abrumadora por 4-1 ante el Oiartzun (4-1). El camino no acababa porque quedaba el último paso para culminar el éxtasis definitivo. El equipo viajó a Tenerife, para jugar contra la UD Tacuense, con la compañía de sus espectadores que abarrotaron la ciudad. Empezaba el partido y los minutos transcurrían, el miedo empezaba a notarse en las futbolistas hasta que apareció Patri para cabecear, para ilusionar a la afición. El equipo aguantó y ese sueño se cumplió.
Apuesta desde la base
El equipo para combatir las dificultades económicas apuesta por la cantera. La permanencia por las jugadoras locales siempre ha sido uno de sus grandes objetivos. La formación y la unión son los dos principales quehaceres del conjunto balear. Todo trabajo tiene su particular premio, y es que grandes jugadoras como Patri Guijarro, Mariona Caldentey, Virginia Torrecilla, Patri Mascaró o Maitane López son claros ejemplos de jugadoras diferenciales en el fútbol nacional.
En la temporada 2015-2016 el equipo descendió a Segunda División. Desde entonces, el club milita en la categoría de plata, ahora denominada liga Reto Iberdrola.
Autor: Pablo Martínez
Fotografía: UD Collerense