Ya hay algunas que están celebrando por todo lo alto y otras que están llorando y lamiéndose las heridas por las esquinas. Esto es la Copa, señoras y señores nada más una y nada menos que la Copa. Un torneo mágico, una competición donde las distancias pasan a ser meros espejismos, no hay hueco para permitirte un día malo, porque te quedas en la cuneta, sin paliativos. No existe tiempo para rectificar, o llegas con la lección bien aprendida y la enuncias de la A a la Z o el suspenso significa despedirte hasta el año que viene. Por todo ello la Copa es tan hechizante y seductora.
El Betis que acudía a la cita como equipo anfitrión y en palabras de su entrenador, «la Copa no es la prioridad de las verdiblancas, es la Liga donde se están jugando las castañas y la vida, aún así, pelearían el partido todo lo posible«. Visto el resultado final, no es que lo pelearon, es que lo repelearon y lo recontrapelearon hasta llevarlo a su extremo máximo, los penales. Y ahí triunfaron. ¡Señoras y señores, bienvenidos al maravilloso mundo de la Copa!.
En las colchoneras volvía Kenti a la banda derecha y por tanto la buena noticia es que Laia regresaba al centro de la defensa, y cuando la kaleshi rojiblanca ocupa su lugar, la defensa atlética funciona mejor, es más segura, más elegante, incluso sus compañeras de línea parecen mejores.
Las chicas que juegan a la orilla de la Giralda, o más o menos, dominaron los primeros cinco minutos, achuchando y llegando a linea de meta. A partir de ahí, el Atlético de Madrid tomó el control, fue un largo periodo donde se conjugaron el asedio de unas y el retroceso de líneas de otras, con lo cual el balón rondó constantemente la orilla verdiblanca. Las ocasiones se sucedieron, de todos los colores, con todos los matices. Solo al final el Betis conquistó sosiego.
El segundo periodo en ocasiones tuvo cariz de correcalles, pero de los peligrosos no vayamos a creer. No obstante, la verdadera amenaza siguió rondando las redes verdiblancas, convirtiéndose la guardavallas local en un auténtico muro capaz de frustrar todas las tentativas visitantes. Llegamos al definitivo noventa con las porterías impolutas, pero con el buen sabor de boca de estar disfrutando de un buen partido cargado de emoción.
En la media hora de alargue, el Betis intentó que el tiempo transcurriera deprisa, como si el cero a cero fuera un excelente resultado, y en verdad que lo era. El Atleti por su parte trataba de imprimir más ritmo a su juego, con un pensamiento totalmente contrario, el empate no lo daban por bueno, no queriendo llegar al tormento de los penales.
Los malditos o gloriosos lanzamientos, esa bonoloto de once metros, ofrecieron al Betis lo oportunidad de avanzar hasta la siguiente ronda, a pesar de que ellas seguirán centradas en salir de lo más hondo de la Liga. El Atleti después de cuatro años consecutivos jugando la final, se queda fuera de ella. Así es la Copa, te da alegrías y la quieres, te destroza pero la sigues queriendo.
FICHA TÉCNICA
REAL BETIS BALOMPIÉ – Gerard, L.G. Rosa, A.G. Rosa, Van Dongen, Fernández, Hernández (Perarnau 120´), Márquez, Ramírez, Dewey (Salas 59´), Rosa (Abam 60´) y Priscila (Piemonte 88´).
ENTRENADOR – P. Cherubino
ATLÉTICO DE MADRID – Van Veennendaal, Kenti, Laia, Tounkara, Menayo, Santos, Meseguer, (Meseguer 78´) Sosa (Charlyn Corral 60´), Sampedro (García 104´), Duggan (Castellanos 70´) y Ludmila.
ENTRENADOR – D. González
AMONESTACIONES – Tarjetas amarillas para A.G. Rosa 13´, Sampedro 29´, Duggan 34´, Ludmila 49´, Fernández 65´, Gerad 93´, Hernández 98´y Laia 116´.
Autor: Emilio Mahugo
Fotografía: Beatriz V. Ávila