«Resistencia férrea» son dos palabras que definen muy bien la labor del Madrid CFF en los octavos de Copa de la Reina, que supo contener —sin miedo al ataque— a las vigentes campeonas de España, la Real Sociedad. El partido se marchó hasta los penaltis tras no moverse el marcador en 120 minutos y ahí Raquel Poza, guardameta del equipo madrileño, fue decisiva con dos disparos detenidos de cuatro que recibió, dando el pase al equipo de Óscar Fernández a cuartos por segunda temporada consecutiva.
No llamativo, porque ya lo hemos visto en el resto de encuentros de estos octavos, pero sí destacable, fue el minuto con el balón parado con el que arrancó el encuentro, en protesta por la prácticamente infinita prórroga para firmar el convenio colectivo en el fútbol español.
Ya con el balón en movimiento, se vio desde el comienzo que el partido iba a ser muy diferente al 5-0 de hace unas semanas en liga. La primera oportunidad fue en la portería defendida por Adriana Nanclares, una jugada por banda derecha en el minuto 3 que se marchó finalmente desviada. Poco después, Geyse avisó seriamente: un precioso recorte en la frontal del área acabó en un disparo que se estrelló en la madera.
En los siguientes minutos dominó el juego el conjunto realtzale, que no cejó en su empeño de buscar los balones a la cocina desde banda derecha. Sin embargo, una de las más claras que tuvo la Real en la primera mitad fue desde banda izquierda, con un disparo potente de Leire Baños desde el ángulo del área que se fue fuera por centímetros.
Con media hora de juego disputada, Geyse intentó la internada por banda izquierda, dejando atrás a cámara lenta a Clau Blanco, para colgar un balón al área pequeña al que no llegó la cabeza de Rita, pero que cogió Moe metros detrás para rematar, sin éxito alguno. A los dos minutos, A Nanclares se le resbaló de los guantes un balón que nuevamente pudo haber aprovechado Rita, pero la nigeriana no estuvo atinada para empujar el balón al fondo de la portería.
Poco faltaba para concluir la primera mitad y Leire Baños envió un potentísimo zapatazo desde la frontal del área al larguero, cuyo rechace cogió Manu para rematar haciendo a Poza estirarse, aunque el esférico no encontró puerta.
El segundo período comenzó con Gonzalo Arconada revitalizando el juego de las suyas, dando entrada en el verde a una ex del Madrid, Lucía Rodríguez, y a la siempre temible Marta Cardona. El juego comenzó movido, con ocasiones en ambas porterías: Poza evitó el gol de la propia Cardona, mientras que un resbalón, que para entonces ya era su cuarto del partido, evitó el de Geyse.
El miedo se palpaba en los posteriores minutos y el medio campo era dominante en ambas escuadras, aunque de nuevo Marta Cardona gozó de un par de oportunidades, incluida una en la que le pitaron un fuera de juego que, por metro y medio, no lo era en absoluto.
El brillo del Madrid lo puso nuevamente una Geyse que en el 68 pudo estrenar el electrónico tras una jugada en la que dribló a tres rivales, aunque el disparo lo terminó por detener Nanclares. Una pérdida del balón provocó una jugada peligrosa de Nahikari, que fue derribada por Frisbie en el semicírculo del área cuando se marchaba en solitario ante Poza, aunque la colegiada no consideró que era una acción punible.
Un fallo de entendimiento en la zaga donostiarra dejó a Geyse, de nuevo, con un balón clarísimo, pero la brasileña volvió a toparse con la madera, gran aliada hoy de ambos conjuntos. Poco después, ya en los diez minutos finales del tiempo reglamentado, el balón se paseó por el área de Raquel Poza y tuvo la Real Sociedad una oportunidad clarísima, pero el balón parecía no querer entrar, tampoco cuando Nahikari remató de cabeza y Poza salvó, de nuevo, el tanto. Sin tiempo para más, el encuentro se fue a la prórroga, el segundo que lo hizo en esta Copa de la Reina, el segundo en tierras vascas.
La prórroga comenzó, nuevamente, agitada. El Madrid reclamó un penalti —que no lo fue— de Nanclares sobre Geyse, con una mano posterior cerca del área contraria que acabó con amarillas para Antónia y Moe Wold. Y ahí acabó lo que pudimos ver. La emisión de ETB1 se convirtió en el Teleberri, el partido pasó a ETB4 y la retransmisión por internet dejó de estar disponible hasta que faltaron 8 minutos de encuentro, pero nada más relevante pasó en lo que quedó de prórroga por lo que el encuentro se fue a la fatídica tanda de penaltis.
Para estos lanzamientos, Óscar Fernández gastó su último cambio, para dar entrada a Ana María Catalá, defensa con pocos minutos esta temporada, pero que goza de una fiabilidad casi absoluta desde los 11 metros.
Comenzó tirando la Real, fue Leire Baños la que abrió la tanda de penaltis. Su lanzamiento, a su derecha, a lado cambiado, fue detenido por Raquel Poza. Rita no falló el primer penalti del Madrid, al igual que Núria Mendoza el segundo de la Real y Yasmin el segundo del Madrid.
Kiana Palacios, que volvía hoy a la competición, tuvo la responsabilidad en el tercer disparo del conjunto txuri-urdin, esta vez a la izquierda, su lado natural, lo detuvo de nuevo Poza con ayuda del palo.
La apuesta de Óscar Fernández para esta tanda, Anama Catalá, cumplió con su responsabilidad y clavó su lanzamiento. Ana Tejada puso el 2-3, pero Amanda Frisbie podía sentenciar la eliminatoria y, en efecto, lo hizo: marcó el cuarto y dio el pase al Madrid a cuartos en una de las tres grandes sorpresas de estos octavos de Copa.
FICHA TÉCNICA
Real Sociedad: Adriana Nanclares ℗, Iraia (Ana Tejada, min 72), Maddi, Etxezarreta, Clau Blanco (Lucía Rodríguez, min 46), Palacios, L. Baños, N. Mendoza, Manu (Marta Cardona, min 46), Nerea Eizagirre (Cecilia, min 106) y Nahikari ©.
Madrid CFF: Poza ℗, Antónia, Moe Wold, Frisbie, Marie, Rita, Estela (Yasmin, min 102), Silvia Rubio © (Ana María Catalá, min 120+1), Geyse, Valéria (Bruna Tavares, min 76) y Maca (Laurita, min 84).
Árbitra: Elena Peláez Arnillas. Amonestó a Nuria Mendoza, Iraia y Leire Baños por parte de la Real y a Valéria, Moe Wold y Antónia da Costa por parte del Madrid.
Incidencias: partido correspondiente a los octavos de final de la Copa de la Reina disputado en las instalaciones de Zubieta (Gipuzkoa).
Autor: Marcos Marín
Fotografía: Noelia García