Ayer se cumplieron 29 años del primer partido que se disputó en un Mundial femenino. Hace mucho tiempo y a la vez demasiado poco. Esta extraña dualidad se percibe cuando lo comparamos con el masculino que comenzó allá por 1930. Pero centrémonos en el que nos atañe, el femenino.
Cuando se trata de seleccionar una destacada futbolista de aquellos años, Sun Wen tiene muchas opciones para ser elegida.
Sun Wen jugó durante casi toda su carrera en Shanghai SVU. También jugó en Estados Unidos. Es la máxima goleadora histórica de la Selección China con 106 goles en 152 partidos. Sin duda una de las grandes figuras del fútbol femenino de todos los tiempos, leyenda viva de la selección de China que disputó cuatro Copas Mundiales. Lo hizo con distinción, llevando a su país a la final de la edición de 1999 disputada en Estados Unidos y recogiendo los premios Adidas Golden Ball y Golden Boot del torneo. Un honor aún más ilustre siguió al año siguiente, cuando Sun encabezó una encuesta de Internet para emerger como ganadora conjunta del premio a la Jugadora del Siglo de la FIFA junto a la futbolista estadounidense Akers.
Pero no fueron estos logros, ni el recuerdo de competir por el título frente a más de 90.000 espectadores en el Rose Bowl, lo que Sun identificó como su mejor momento. En cambio, volvió al comienzo de la historia de la Copa Mundial Femenina, el partido inaugural de la primera edición de este torneo disputada en su país, China, en 1991, concretamente el partido inaugural. Sun Wen solo tenía 18 primaveras. Ella asegura que fue «la experiencia más inolvidable de mi vida«.
«Mi mayor recuerdo de la Copa Mundial Femenina es cuando participé en el primer torneo en China«, dijo a FIFA TV. «Todavía recuerdo nuestro himno nacional sonando antes de nuestro primer partido. Estaba tan nerviosa que no sabía qué hacer. Todo lo que pude pensar fue, ‘Respira’. Fue un momento tan inspirador y emocionante«.
Sun y sus compañeras de equipo dieron una actuación que desmentía sus nervios previos al partido. La selección rival en aquel encuentro, Noruega, que llegaría a la final y ganaría el trofeo cuatro años después, fue goleado 4-0 frente a un delirante público de 65.000 espectadores. Sin duda, la Copa del Mundo Femenina había comenzado de manera espectacular.
Autor: Luis Fernando Ramos
Fotografía: FIFA