En nómina tan solo se contaba con Lola Gallardo, por tanto era evidente que el club rojiblanco tenía que reforzar la portería. La cuestión era fichar a un valor emergente y que viviera a la sombra de Lola, o hacerse con una cancerbera con solvencia para que dispute los minutos bajo el arco colchonero. Parece que el cuerpo técnico se ha decidido por la segunda opción.
Patricia Larqué es la última jugadora, por el momento, en incorporarse a las filas atléticas. Nacida en Zuera, Zaragoza, se formó en las categorías inferiores del club de la capital maña. En la temporada 2013-14 se incorporó a la primera plantilla. Permaneció en ella durante cinco años. De aquí pasó al Santa Teresa y de este volvió a dar un salto, en esta ocasión, para formar parte del Rayo Vallecano. En el barrio madrileño jugó tres cursos. Finalmente, recaló en el Alavés. Ha cambiado Vitoria por Madrid, ya que ha estampado su firma en un contrato que unirá su destino al del Altético de Madrid hasta el 30 de junio de 2024.
Por tanto, podemos comprobar que Patricia cuenta con una amplia experiencia en su oficio. No viene al club de la osa y el madroño para presenciar como L0la Gallardo juega todos los partidos. Ni mucho menos. Su intención es ponérselo muy complicado a Manolo Cano y que la encargada de defender las redes colchoneras sea ella.
En principio y por aquello de la veteranía en la plaza podemos pensar que la titular será Gallardo, por otro lado Patricia tiene tablas suficientes para salir airosa en la disputa, y de cualquier modo la temporada es muy larga, puede haber sanciones, lesiones y como ya sabemos diferentes momentos a lo largo del año.
Si tuviéramos que definir a Patricia como arquera podríamos decir que se trata de una jugadora muy ágil, con una rapidez eléctrica y que además atesora entre sus habilidades algo muy importante, un buen juego con los pies.
Lo cierto es que el Atlético de Madrid cuenta con dos porteras de garantía. Más trabajo para el entrenador, bendito dilema.
Autor: Emilio Mahugo
Fotografía: Atlético de Madrid