Por primera vez en su historia, las Matildas australianas debutan con victoria en unos Juegos Olímpicos. Gol y asistencia para la capitana Sam Kerr, que firmó una impecable primera parte. Las kiwis siguen con la mala racha de derrotas frente a las aussies: 27 años consecutivos sin conocer la victoria contra sus vecinas.
AUSTRALIA 2 – NUEVA ZELANDA 1
Buen partido de las Matildas, que debutan con una victoria importante frente a las Football Ferns neozelandesas. Estar en uno de los grupos más complicados de la competición hace que cada partido se juegue como una final, aunque sólo estemos en la primera jornada de la fase de grupos.
Desde que la colegiada mexicana Lucila Venegas hizo sonar el silbato, las australianas mandaron en el campo. Mantenían la presión alta en todo momento, jugando al toque y dejando muy buenas sensaciones. La tónica de todo el encuentro fue ésta.
Gran partido de Kyah Simon y Emily van Egmond, que parecía que llevaban el balón pegado a los pies. La precisión en los pases fue también clave del buen juego desplegado por las aussies.
Las ferns tuvieron que pelear por cada balón mientras trataban de echar el cerrojo en defensa, algo que funcionó bien para evitar que las eternas rivales anotasen más goles.
Un balón colgado de Ellie Carpenter (otra de las destacadas del encuentro) a punto estuvo de meter en líos a las ferns. Cuando todos cantábamos el gol en propia puerta, una providencial Nayler obró el milagro de evitarlo.
Dos goles en la primera parte fueron suficientes
Corría el minuto 20 y Sam Kerr le daba una asistencia de oro a su compañera Tamika Yallop. El 1-0 subia al marcador, para alegría de las australianas.
Con el marcador a favor, las aussies seguían presionando buscando aumentar la diferencia con sus rivales. Las kiwis, con una férrea defensa, mantenían el tipo.
El segundo gol llegaría a balón parado. Catley sacaba magistralmente de esquina para que Kerr rematase de forma certera de cabeza. Se acababa así la sequía goleadora de la delantera con su selección, que llevaba cinco partidos sin anotar.
De nuevo Kerr, y de nuevo de cabeza, a punto estuvieron de meter el tercero y sentenciar justo antes del descanso, pero el balón salió por encima del travesaño.
El balón no quería entrar de ningún modo
Arrancó la segunda parte siguiendo el mismo patrón de la primera. Las australianas se cansaron de generar ocasiones, pero toda su fortuna goleadora se había agotado en los primeros 45 minutos.
Un tiro de Simon salió rozando por milímetros el poste apenas dos minutos después de volver del vestuario. Cuatro minutos más tarde era Kerr quien fallaba otra ocasión cantada.
Y cuando no era la falta de puntería quien negaba el tercer gol a las Matildas, era Nayler quien atajaba. La meta de las ferns salvó varias ocasiones peligrosas y fue una de las mejores jugadoras de su selección.
Kerr, Carpenter y compañía seguían generando ocasiones, pero el marcador seguía anclado en el 2-0.
Ya en el tiempo de descuento, las neozelandesas trazaron una jugada rápida y precisa con la que se plantaron en el área rival. Gabbi Rennie, que apenas llevaba tres minutos en el terreno de juego, empujaba el balón al fondo de la red y recortaba diferencias, pero ya no había tiempo para más.
Agridulce debut para Rennie, que anotaba el gol de la honra para su selección, aunque de poco servía.
Las Matildas se enfrentan a Suecia el próximo sábado, mientras que las neozelandesas tienen por delante el reto de medirse a la selección estadounidense, que llega con ganas de resarcirse tras la derrota en su partido inaugural.
Todos contentos pese al resultado
La capitana de las Matildas, Sam Kerr, se mostraba encantada tras obtener la victoria en el partido inaugural de los Juegos Olímpicos. Para la jugadora, ganar este partido es sólo el comienzo: “Nos sentimos bien. Primera victoria del campeonato, tan sólo la primera etapa en este viaje. Conseguir los tres puntos era el objetivo de hoy, es un chute de confianza”.
Kerr asistió en el primer gol y anotó el segundo para su selección.
“Obviamente, me hubiese gustado anotar alguno más y haber sentenciado el partido mucho antes, pero mantuvimos el control del partido todo el tiempo. Como delantera, siempre que anotas eres feliz, pero en este caso la victoria es mucho más importante”.
Para Tom Sermanni, seleccionador de Nueva Zelanda, el haber anotado un gol les arroja esperanza, pese a la derrota: “Jugar este tipo de encuentro sin duda para nosotras es beneficioso. Nos ayuda a centrarnos y a entender qué es lo que debemos esperar del siguiente partido”.
Ali Riley, la capitana de las ferns, considera que el partido del sábado contra Estados Unidos como un desafío al que deben enfrentarse con la cabeza bien alta: “Es un torneo rápido y debemos ser muy específicos en cuanto a nuestra preparación y al análisis de este último partido, no puedes pararte a pensar mucho en el resultado, porque debes prepararte para el siguiente”.
FICHA DEL PARTIDO
Australia: Williams (P), Catley, Polkinghorne, Carpenter, Yallop (Cooney-Cross, min. 75), Luik, Van Egmond, Raso (Kennedy, min. 83), Foord (Gielnik, min. 91), Simon (Fowler, min. 75) y Kerr (C).
Entrenador: Tony Gustavsson.
Nueva Zelanda: Nayler (P), Green (Satchell, min. 68), Erceg, Moore, Riley (C), Percival, Bowen, Bott (Rennie, min. 89), Chance (Cleverley, min. 68), Hassett y Wilkinson.
Entrenador: Tom Sermanni.
Goles: 1-0 Yallop (min. 20), 2-0 Kerr (min. 34) y 2-1 Rennie (min. 90+2).
Árbitra: Lucila Venegas.
Partido disputado en Ajinomoto Stadium, Chofu.
Incidencias: Tarjeta amarilla a Bott (Nueva Zelanda, min. 72) y tarjeta amarilla a Bowen (Nueva Zelanda, min. 81).
Autora: Marga Martín
Fotografía: Matildas
Fotografía interior: New Zealand Football