Disputadísimo encuentro en el estadio de Wembley, donde Manchester City terminó imponiéndose por poderío físico frente a un Everton con una sólida defensa y una aún más sólida arquera.
MacIver fue la gran protagonista del cuadro de Liverpool, mientras que por parte de las mancunianas Sam Mewis volvió a demostrar que puede echarse un equipo, una final y lo que le quiera a sus espaldas.
El partido arrancó con posesión del City y con un Everton muy organizado en defensa. Los intentos del Manchester por llegar al área se veían frustrados una y otra vez por las de Willie Kirk, que no dejaban huecos, sacrificando a sus jugadoras de ataque para reforzar las líneas traseras. Aún así, las toffees les dieron un par de sustos a las citizens en forma de contraataque, que parecían ir algo más lentas a la hora de replegar atrás.
Los planteamientos de los entrenadores eran claros: el City salía a atacar con todo, mientras que el Everton no iba a conceder ni un solo metro atrás.
Tras varios toma y daca de los equipos, la primera ocasión clara de gol la tuvo Damaris Egurrola para el Everton en el minuto 15 con un tiro que se fue por encima del larguero.
El partido por breves instantes parecía abrirse más, el balón se movía de área a área, y Chloe Kelly, con una definición buenísima ajustada al palo, pudo adelantar a las suyas, pero fue interceptado por MacIver sin problemas.
Mewis, una de las mejores jugadoras del partido, dejó una pequeña muestra de su calidad con un control de tacón, adelantándose a la defensa a trompicones y poniendo en apuros a MacIver por primera vez en el partido, aunque finalmente la guardameta consiguió hacerse con el esférico.
Por su parte el Everton no desaprovechaba ninguna oportunidad, siendo Gauvin una de las atacantes con más mordiente. Tanto en jugada de equipo, como a balón parado, la jugadora a buscar para el remate era ella, mientras Graham y Sorensen se encargaban de aligerar el juego por las bandas y buscar el enlace con la francesa. Un cabezazo que se fue fuera por poco era la señal de que las del City no podían relajarse ni un solo instante.
Lavelle y Mewis por su parte jugaban a encontrar los pocos huecos que dejaban las defensoras del Everton. Weir y Kelly intentaban, sin fortuna, poner en aprietos a MacIver.
El primer gol llegó en una jugada a balón parado. Sam Mewis, completamente desmarcada, anotó de cabeza tras un saque de corner de Greenwood en uno de los pocos errores concedidos por la defensa de las de Liverpool.
Por momentos el partido se puso feo por la intensidad en las entradas de las citizens. Al descanso, Gauvin y Damaris llegaron tocadas tras varios encontronazos con las rivales.
0-1 al descanso y la sensación de que el partido no estaba sentenciado.
Tras la pausa, la tónica parecía ser la misma: intento de asedio de las citizen al área de las toffees, con muy pocas concesiones por parte de ellas. A punto estuvo de subir al marcador el 0-2 en una jugada de Lavelle, pero MacIver volvió a ser la salvadora de su equipo.
El gol que marcó la igualdad en el marcador vino de nuevo en una jugada a balón parado. Izzy Christiansen sacó un corner medido a la cabeza de Gauvin, que la peinó para mandarla al fondo de la red.
Con la entrada de Stanway por Ellen White, las de Gareth Taylor imprimieron más juego físico, que terminó por dejar tocadas del todo a varias de sus contrincantes. Aún así, el Everton aguantaba el tipo frente a las embestidas del City, que demostraban más superioridad física que las de Kirk. Al finalizar los 90 minutos reglamentarios, jugadoras como Bronze o Mewis estaban casi tan frescas como las que acababan de entrar de recambio, y ésa fue la clave a la hora de afrontar el tiempo extra.
Graham y Gauvin (que ya salió renqueante al descanso) tuvieron que ser sustituidas antes de la prórroga. Finnigan y MacIver plantaron cara durante la primera parte a los ataques de Stanway, pero en cuanto el 1-2 subió al marcador, el Everton bajó completamente los brazos por el tremendo desgaste físico. El 1-3, ya en tiempo de descuento, marca un resultado injusto para el nivel de juego y entrega de las jugadoras del cuadro scouser.
Tras el encuentro, Gareth Taylor afirmaba sentir «una mezcla de emociones, es una locura. Hemos dominado por bastantes momentos el juego, pero ha estado muy igualado. Aún así, el empate a uno me resultaba cómodo. Sabía que si seguíamos fieles a nuestros principios todo saldría bien«.
Willie Kirk por su parte afirmó estar «muy orgulloso de mis jugadoras, el cuerpo técnico y todo el proceso para preparar la final. Desgraciadamente, alguien tenía que perder hoy. Hemos sido muy iguales hasta la prórroga, generando ocasiones casi hasta el pitido final. El City mereció la victoria, pero nosotras se lo pusimos difícil hasta el final. Ellas simplemente tienen ese algo más que las ha hecho hoy ganadoras«.
Dura derrota para el Everton tras un juego brillante y valiente. El Manchester City levanta la FA Cup por tercera vez en su historia.
FICHA DEL PARTIDO
Everton, 1
Manchester City, 3
Everton: MacIver (P), Moe Wold, Turner, Finnigan, Sevecke (Pattinson, min. 90), Damaris (Stringer, min. 99), Christiansen, Raso (Boye-Hlorkah, min. 76), Graham (C) (Pike, min. 90), Sorensen y Gauvin (Magill, min. 90).
Entrenador: Willie Kirk.
Manchester City: Roebuck (P), Stokes, Houghton (C), Kelly (Beckie, min. 118), White (Stanway, min. 63), Weir, Bronze, Lavelle (Park, min. 70), Mewis, Walsh y Greenwood.
Entrenador: Gareth Taylor.
Goles: 0-1, Mewis (min. 40), 1-1 Gauvin (min. 60), 1-2 Stanway (min. 111) y 1-3 Beckie (min. 120).
Partido disputado en Wembley Stadium.
Árbitra: Rebecca Welch (Durham FA).
Asistentes: Sian Massey-Ellis (Birmingham FA) y Natalie Aspinall (Lancashire FA).
4ª árbitra: Abi Byrne (Suffolk FA).
Incidencias: Tarjeta amarilla a Bronze (Manchester, min. 16), tarjeta amarilla a Raso (Everton, min. 25) y tarjeta amarilla a Stanway (Manchester, min. 82).
Autora: Marga Martín
Fotografía: The FA