La escuadra alemana vence al Bordeaux de Patrice Lair por tres goles a dos en el primero de los enfrentamientos que deben disputar. A las siete de la tarde comenzaba un partido repleto de ocasiones, en el cual, los espectadores del AOK Stadion disfrutaron del ritmo trepidante que caracteriza a la Women’s Champions League. Los ataques brillaron más que las defensas, al menos, en el caso del conjunto francés. Dos de los tantos anotados por el Wolfsburgo llegaron, en parte, gracias a los errores defensivos de las futbolistas galas.
Tres goles y una lesión en solo 45 minutos
Ni siquiera se habían sobrepasado los quince minutos de choque y el marcador ya indicaba un empate a uno. El equipo teutón, dirigido por Tommy Stroot, combinaba cerca del área de sus rivales cuando, tras un centro lateral, Wolter asistía de cabeza a su compañera, Pajor, para adelantar al Wolfsburgo. La reacción del combinado francés no se hizo esperar, puesto que con tan solo tres toques de balón desde el saque de centro, el Bordeaux devolvió la igualdad a la eliminatoria. Un balón largo a la espalda de la lateral, sumado a un centro medido y a una gran anticipación de Snoeijs dieron su primer tanto al conjunto de Lair. La inercia del segundo gol del encuentro hizo que la escuadra gala llevara la iniciativa. Sin embargo, un desconcierto repentino en el área del Girondins fue aprovechado por Roord para fusilar un balón muerto en el punto de penalti. Las francesas siguieron intentando cambiar las tornas del partido, de hecho, lograron varias ocasiones peligrosas en el primer tiempo, aunque no acertaron.
La nota más negativa llegó en el minuto 37. Herrera Monge, del Bordeaux, se preparaba para centrar, pero fue interceptada por Wendemeyer de manera limpia. La atacante costarricense cayó al suelo y su tobillo se torció de manera ostensible. Entraron las asistencias, gracias a lo cual la jugadora del equipo francés no abandonó el partido por su propio pie.
Dominio francés durante la segunda parte
Las chicas de Patrice Lair continuaron con una presión alta y un juego directo, lo cual incomodó a la defensa germana. Ahora bien, la falta de acierto en ambas áreas fue la “cruz” del Girondins de Bordeaux. Como en el primer tiempo, la indecisión hizo mella en la defensa del equipo azulón y en el minuto sesenta Janssen puso el tres a uno ante una defensa muy poco contundente. Con tan solo una falta colgada, el Wolfsburgo fue capaz de rematar en el área pequeña sin oposición para ampliar su ventaja. Pese a ello, el combinado galo continuó realizando peligrosas internadas en campo rival, de hecho, diez minutos más tarde marcó su segundo gol. Pese a la multitud de transiciones que podrían haberles dado ese tanto a las francesas, fue un error “grosero” de Lattwein el origen de la ocasión más clara. La pivote alemana condujo el esférico sin oposición hasta que, en un recorte errado, le robaron la pelota. Un solo pase bastó para que Cardi quedara sola contra la guardameta teutona, situación en la que no falló. Los últimos compases del partido se cerraron con un Burdeos volcado en el ataque, pero ya sin demasiadas fuerzas como para rebasar el entramado defensivo alemán.
Ficha técnica:
VfL Wolfsburgo: Weiß (P), Hendrich, Oberdorf, Janssen, Wendemeyer (Doorsoun-Khajeh, 76’), Lattwein, Waßmuth (Blomqvist, 62), Roord (Knaak, 62’), Huth (Starke, 83’), Wolter y Pajor.
Entrenador: Tommy Stroot
Girondins Bordeaux: Moorhouse (P), Lardez, Berkely, Gilles, Perisset, Jaurena (Folkertsma, 65’), Bibault, Lavogez, Herrera Monge (Cardia, 41’), Garbino (Palis, 52’) y Snoeijs (Gudmundsdóttir, 65’).
Entrenador: Patrice Lair
Goles: Pajor (13’), Snoeijs (14’), Roord (19’), Janssen (60’) y Cardia (70’).
Incidencias: Lesión de Herrera Monge (37’).
Estadio: AOK Stadion
Autor: Arsenio Besga
Fotografía: VfL Wolfsburg