Hoy tenemos la inmensa suerte, de conocer un poco más de cerca a una gran jugadora. Se llama Verónica Campillo, es una fútbolista española, nacida el 13 de abril de 2002, que juega como defensa. Se ha criado futbolísticamente en el Racing Féminas, y ha crecido profesionalmente, en el Joventut Almassora. Ahora emprende una nueva aventura en la UD Aldaia. No os perdaís esta entrevista os va a encantar. ¡Empezamos!
¿Cómo fueron tus inicios en el fútbol?
Desde pequeña me crie con un balón entre los pies. Cada tarde, salía al jardín de casa, o a la pista del pueblo, a jugar con mi hermano. Otros días, mi padre, y mi hermano, se iban a entrenar con sus respectivos equipos, y yo iba a verlos con mi madre. Iba con el uniforme del colegio y los zapatos. Una vez allí, no podía resistir la tentación de jugar, y acababa rompiendo el uniforme del colegio y los zapatos (risas). Al principio mi madre se enfadaba, pero se la acababa pasando porque me veía feliz.
¿Contaste con el apoyo de tu familia?
Sí, siempre conté con el apoyo de ellos, a los 8 años, me apuntaron en el equipo del pueblo (Entrambasaguas), donde estuve 4 años, y donde se formaron las bases de lo que soy ahora. Allí cumplí dos de mis objetivos, el primero jugar al fútbol en un equipo, y lo segundo ir a la selección cántabra sub-12.
¿Te costó mucho abrirte paso en un mundo tan machista?
No, en absoluto, en mi familia, siempre se ha vivido el fútbol y nunca me han puesto ningún impedimento para realizarlo. Cuando jugaba en el pueblo, con los chicos, no tuve tampoco ninguna pega, es más, los padres de los rivales, me felicitaban, y les encantaba que hubiese chicas jugando al fútbol. Sin embargo, cuando llegué al Racing, que jugábamos contra chicos, al ser infantiles, si se escuchaban comentarios absurdos; lo que más me impactaba, eran los comentarios de las madres, que nos decían que nos dedicáramos a fregar. Pero, a pesar de todo, prefiero quedarme con lo bueno, y con el apoyo que recibía de mi familia.
¿Te costó mucho llegar a alcanzar la categoría de profesional?
Nada es fácil, y hay que trabajar mucho para conseguirlo. Nadie te regala nada, pero con esfuerzo, todo se puede. Lo que sí, me costó dar, fue el paso de irme fuera de casa, para jugar, ya que siempre he estado en el mismo equipo, con la misma gente. Pero no me arrepiento de nada, lo volvería a repetir mil veces.
Por suerte te ha pillado en una época en la que el fútbol femenino está creciendo exponencialmente. ¿Qué opinión tienes al respecto?
Es una muy buena señal que cada vez esté mejor visto y valorado que las chicas juguemos al fútbol, por suerte. Espero y deseo que algún día llegue a valorarse tanto, como el masculino.
¿Cómo te surgió la oportunidad de fichar por la UD Aldaia?
Tras mi fichaje por el Joventut, dónde no tuve mucha suerte, ya que no pude debutar en Reto, hablé con mis padres, y les comuniqué, que yo lo que quería era jugar, porque estaba dejando de creer en mí, y estaba perdiendo esa confianza, ya que, no me llegaba la oportunidad por la que luchaba en cada entrenamiento. Mi representante, Joaquín Julia de jj football agency, consiguió comunicarse con varios equipos, y dio con el Aldaia, que estaban interesados en mí. Gracias a él, y a este club, conseguí debutar en la Reto Iberdrola, y jugar mis primeros 45 minutos. Ahora toca seguir trabajando, para llegar lo más lejos posible, y disfrutar de este sueño que se está haciendo realidad.
¿Cómo estás viviendo el sueño de jugar en la Reto?
¡Encantada! para mí cada partido es un reto, porque es una liga que supone mucho esfuerzo, y mucha lucha por conseguir los tres puntos, cada fin de semana. Los equipos están muy igualados y eso supone tener que esforzarte al máximo. Estoy segura que conseguiremos llegar lejos.
¿Cómo consigues estar siempre motivada y al 100% , pese no haber tenido un buen resultado, la jornada anterior?
¡Eso es más complicado! (risas). En el fútbol todo el mundo trabaja la fuerza, la resistencia, la táctica y mil cosas más, pero poca gente, trabaja, lo que es la cabeza, en el sentido de que muchos de nosotros, estamos tan ciegos, que sólo nos fijamos en lo lejos que queremos llegar, que muchas veces se nos olvida disfrutar del camino. Mucha gente cuando falla, se viene abajo enseguida, (yo me incluyo), porque todos pasamos por esa mala racha, en la que bajamos la cabeza, y no vemos más allá, pero cuando la levantamos y vemos el esfuerzo, que están realizando, nuestros familiares, el club, nuestro equipo técnico y sobre todo cada una de las compañeras que tenemos al lado, te das cuenta de que por ellos debes dar lo mejor de ti. No rendirte nunca, pase lo que pase.
¿Qué es lo que más amas de este deporte?
La sensación de felicidad cuando ganas un partido, o un torneo. Ese sentimiento es único; pero me quedo con las buenas amistades, que haces en cada equipo, todos, absolutamente todos, te aportan algo, que te ayuda a crecer tanto personal como profesionalmente.
¿Qué les dirías a las niñas que en un futuro quieren dedicarse profesionalmente a este deporte?
Que luchen por sus sueños, que a pesar de lo que opinen los demás, nunca se dejen influenciar y que no se rindan. Lo más importante para mí, que escuchen y sigan los consejos de su familia, que son los que siempre, pase lo que pase, estarán ahí apoyándolas en lo que sea.
Aunque eres defensa… ¿qué posición es la que más te gusta?
He jugado en varias posiciones. pero la que más me gusta es lateral. Me gusta ayudar al equipo a defender, y si puedo de vez en cuando, subir por la banda y ayudar en el ataque.
Cuando dejes de ser una Reina del balón, ¿a que te gustaría dedicarte?
Me encantaría, y estoy estudiando para ser psicóloga. Creo que es una profesión que tiene mucho futuro, me gusta mucho ayudar a las personas, y es una profesión que en casos extremos puede salvar vidas.
Hasta aquí, la entrevista con esta Reina del balón, que además, de ser una gran profesional, es una gran persona. Desde este diario le damos las gracias por concedernos estas grandes declaraciones, y la deseamos mucho éxito en su vida como jugadora de fútbol profesional.
Autora: Sora Garay
Fotografías: UD Aldaia