Van quedando muy pocas posibilidades de cambiar el rumbo, de cambiarlo a mejor. En realidad, las mismas que para evitar una desgracia indeseable. Es cierto.
El Levante insiste en apropiarse esa tercera plaza que le da opción a visitar Europa y cómo no, procurará mejorar y alzarse con la segunda. Lo del Atleti es más dramático, la tercera posición va tomando tintes de utopía, y todo hace indicar que el pasaporte continuará guardado en el cajón. Por otro lado, concluir en cuarto lugar siempre es mejor que hacerlo en quinto, por mucho que digan que no hay quinto malo.
A las doce de la mañana con un sol pecaminoso para algunos de los inventores del fútbol, se dieron cita azulgranas y rojiblancas. Estas ultimas ejercían de anfitrionas y ponían el terreno de juego.
El primer periodo fue una lucha continua por hacerse con el control del centro del campo. La batalla la ganó el Atlético de Madrid que a poquito fue dominando y encontrando con más facilidad los caminos hacia la portería rival. A la media hora el marcador lucía un merecido dos a cero.
No tuvo tiempo el conjunto local de saborear la distancia, en unos escasos dos minutos el Levante acortó el luminoso dejándolo en un inquietante dos a uno. A partir de aquí sonó el despertador para las visitantes, aunque no hubo tiempo para mucho más, la cercanía del descanso impidió acometidas de mayor envergadura.
Segunda parte
La segunda mitad, ojo con la segunda mitad, fue un monólogo. Desde el inicio hasta el fin del espectáculo el conjunto valenciano se adueñó de todo, del terreno de juego, del balón, del tiempo, del control. Poco más y se lleva las llaves de la ciudad de Alcalá de Henares. ¿Que ocurrió? Tal vez un compendio de situaciones, es cierto que el Atleti se vino a bajo, que el Levante se posicionó muchísimo mejor…
De cualquier modo la situación fue la siguiente: las visitantes sacaron a relucir todos los argumentos posibles para perforar las redes contrarias y las locales se dispusieron para defender numantinamente la ventaja adquirida. La retaguardia colchonera impidió que las aventuras azulgranas pasaran a mayúsculas y se diluyeran como la haría un azucarillo en un océano, sin alterar el sabor de las aguas.
El Atleti lo fio todo al pelotazo y la carrera, táctica que si bien no obtuvo fruto alguno, sí al menos sirvió para que el resultado no se moviera, y para demostrar una vez más que en la agonía también hay gozo. La ventaja en la tabla clasificatoria ha disminuido para gozo rojiblanco. Tan solo quedan cuatro jornadas, para alivio del Levante. ¿Imposible? No. ¿Complicado? Muchísimo.
FICHA TÉCNICA
Atlético de Madrid: Gallardo, Menayo, Rodríguez, Medina, Moraza (Pérez 72´), Maitane, Majarín, Banini (Ajibade 62´), Guerrero (Santos 46´), Navarro (Lundkvist 72´) y Moral (Staskova 87´).
Entrenador: Manolo Cano
Levante UD: Tarazona, Mendoza, Tomás (Carbonell 74´), Méndez, Alharilla (Lloris 46´), Andonova, Fernández (Ferez 84´), Baños, Pinto, Redondo y Ramírez.
Entrenador: José Luis Sánchez Vera
Goles: 1-0 Navarro 22´. 2-0 Moral 32´. 2-1 Pinto 34´.
Colegiada: Olatz Rivera Olmedo
Amonestaciones: Tarjeta amarilla para Maitane, Rodríguez y Mendoza.
Autor: Emilio Mahugo
Fotografía: At. Madrid