El equipo femenino del Rayo Vallecano, se ha plantado, y ha decidido, no entrenar, hasta que se regularice su situación laboral. Según la AFE, y de la mano de su presidente David Aganzo, el club está cometiendo un fraude laboral, con el equipo madrileño, al tener a sus jugadoras sin contrato, aun cuando, ya se habían estado preparando para la pretemporada.
Miedo a lesiones
Pese a la situación, anteriormente expuesta, las vallecanas jugaron un partido amistoso contra el El Pozuelo. Precisamente, las jugadoras dieron un margen de confianza al club franjirrojo, pero al ver que la situación no ha mejorado, han decidido parar de hacer sus obligaciones profesionales, precisamente por el miedo a posibles lesiones y a estar en una situación de indefensión.
Quieren las mismas condiciones que sus compañeros masculinos
Qué mínimo que estar dadas de alta de la Seguridad Social, pero desde el club, aseguran que no están obligados a darlas de alta, ni a hacerlas contrato todavía, ya que esos entrenamientos se han dado de forma voluntaria.
Se debe regular que todas las empresas tengan un plan de igualdad
Se debería implantar una auditoría, en la que participaran los sindicatos, y es ahí, dónde se debe demostrar y asegurar, que tanto los trabajadores y las trabajadoras, deben tener los mismos derechos laborales.
Es una situación que viene ya de años atrás
Por ejemplo, en el tema del aparcamiento de los coches; los jugadores, pueden aparcar dentro de la Ciudad Deportiva, mientras que las jugadoras deben aparcar fuera.
Además, en la tamporada pasada, ocurrió la misma situación; las hicieron los contratos, a principios de septiembre. A parte, que con la situación pandémica todavía activa, a las jugadoras sólo se las ha realizado un test COVID-19, cuando están entrenando a un nivel colectivo.
A pesar de toda esta situación la directiva asegura estar muy tranquila.
Seguiremos informando de posibles novedades.
Autora: Sora Garay
Fotografía: EFE