Ayer les ofrecimos la primera parte, en la que nuestro protagonista hablaba de sus inicios en el mundo del fútbol femenino. En esta segunda entrega de la entrevista con David Aznar hemos ahondado más en su faceta como entrenador al frente del Real Madrid femenino.
Recordemos que el conjunto blanco tuvo sus inicios en la temporada 2020/21, con un primer encuentro en su historia que marcó también el primer clásico.
Un partido que no fue nada fácil para el equipo, ya que de primeras se medían con el actual campeón de liga. Y también tenían que lidiar con el hecho de que era el primer partido que jugaba el equipo, un conjunto con una mezcla de jugadoras nuevas, muchas de ellas internacionales.
Frente a la otra mitad del equipo que ya se conocían de al menos haber coincidido en algún tramo de su carrera profesional, o ya jugaban juntas en el CD. Tacón.
Un primer encuentro, en el que el FC Barcelona las ganó, pero no por goleada, como muchas veces el conjunto azulgrana nos tiene acostumbrados. Algo que las hizo a las galácticas ser positivas, y trabajar en los errores.
En la primera vuelta, muchos rumores acaecieron en el vestuario femenino. Que si jugadoras de un «bando» y «otro» no acababan de cuajar.
Que si el entrenador no conseguía hacerse con el equipo. Seguidamente salió en Amazon Prime un documental sobre el Real Madrid femenino, que no hizo más que poner en tela de juicio de nuevo al equipo.
Y el ruido de voces sonaba más en negativo, que en positivo. Mientras que el departamento de comunicación del Real Madrid femenino, prefería mantener una línea de absoluto silencio, como bien dice un antiguo dicho, manteniendo «los problemas en casa«.
Cuando hablé con Aznar y le pregunté: ¿Cuáles habían sido las mayores dificultades que se había encontrado?, el míster me hizo un pequeño balance, tanto de su etapa con el C.D Tacón, como con el Real Madrid.
Su valoración de cuando cogió por primera vez el C.D Tacón:
«Cada temporada que he vivido he tenido una dificultad diferente. Recuerdo el año del ascenso. En el que lo más difícil fue levantar a un equipo roto, por haber perdido ese ascenso en el último partido la temporada anterior. Y convencerlas, y prepararlas mentalmente para que esa temporada no volviera a pasar. Y llegaran lo mas fuertes posible a ese momento«.
Su primer curso en Primera División femenina con el C.D Tacón:
«Lo más complicado fue equilibrar un vestuario donde convivían 12 jugadoras que debutaban en Primera, con estrellas mundiales y jugadoras que lo habían ganado todo«.
«No fue un contexto sencillo. Y la capacidad de crecimiento de esas jugadoras del Tacón, con la adaptación a las circunstancias de esas jugadoras extranjeras, fue lo que nos permitió ser un equipo competitivo y mantener la categoría«.
Y tras la conversión del C.D. Tacón al Real Madrid:
«Y ya como Real Madrid, la mayor dificultad es que estás en un club que quiere éxito inmediato porque así lo dice su historia. Te pones la camiseta, y estás obligado a ganar siempre«.
«Entonces necesitas crecer muy rápido y adaptarte a un entorno de exigencia y de critica constante. Pero también soy consciente que cada dificultad nos da una oportunidad de ser mejores y yo al menos he intentado vivir cada temporada de esa manera«.
El Real Madrid femenino es un equipo con un escudo con un peso muy importante. Muy poca gente en el mundo puede decir que no conozca lo que es el Real Madrid. En cada partido que las jugadoras juegan, son numerosos los apoyos que tienen a nivel internacional.
El escudo del Real Madrid es un escudo muy ligado al éxito, donde han jugado muchos de los mejores jugadores de fútbol masculino del mundo. Junto a su extenso palmarés, hace que sea una responsabilidad muy grande ponerse al frente del conjunto blanco, aunque muchas veces no favorezca ni el momento ni el lugar.
Pero, a pesar de todos sus contras, llevar en tu curriculum haber entrenado al primer equipo femenino del club vikingo, es algo que muy pocos entrenadores han podido hacer. Y a parte hoy en día, David Aznar ha pasado a ser uno de los miembros que ha construido la historia del Real Madrid femenino.
David Aznar sólo tiene palabras de agradecimiento, para el club que fue su casa durante una temporada y media.
«Siempre diré que para mí ha sido un orgullo y un privilegio ser el primer entrenador de la historia del Real Madrid Femenino y estoy muy agradecido al Club por confiar en mí y hacerlo posible«.
Su primer temporada con el conjunto blanco fue una experiencia única, y con gran carga emocional:
«El año pasado viví una experiencia increíble. Poder sentir en primera persona la sensación de representar al Real Madrid, de hacerte esa primera foto oficial junto al Presidente, o de ver crecer el proyecto con la incorporación de jugadoras con mucho talento«.
El gran club que es el Real Madrid, y todos los recursos que poseen es algo que muy pocos clubes tienen a mano. Al igual que la afición, que aunque no se pudo vivir en parte hasta esta última temporada, siempre se han hecho sentir muy cerca:
«Tener la suerte de haber estado rodeado de los mejores medios humanos y materiales. Y de ver con el cariño con el que nos recibieron en Valdebebas, y de sentir como nos empujaba desde fuera la afición. Fueron momentos muy bonitos«.
Nadie dijo que entrenar al conjunto vikingo fuera fácil, y más con las altas expectativas que había sobre ellas. Y aún más con un equipo que en parte debía comenzar con una mentalidad desde cero, y crecer todas las jugadoras a la vez:
«A nivel deportivo estuvimos por encima de las expectativas, porque nadie contaba con nosotras para esos puestos de Champions«.
«Pero el día a día y el crecimiento de muchas jugadoras nos ayudaron a estar en esas posiciones y mantener una lucha preciosa junto al Levante por esa segunda plaza hasta prácticamente el último partido«.
«Tratamos de que la gente que ama el Real Madrid se sintiera orgullosa de nosotras y devolver al club la confianza y la apuesta por este equipo femenino. Creo que todos lo vivimos así y pudimos disfrutar de una temporada preciosa».
Hubo muchos momentos en los que a David Aznar la prensa le juzgó como entrenador del conjunto blanco. Y muchas de las noticias publicadas, iban dirigidas en torno a su sustitución.
E incluso, algunos medios se hicieron alarde de una carta firmada por el vestuario blanco, en contra de que Aznar siguiera al frente de la plantillas. El míster nos responde así:
«Ser entrenador del Real Madrid no es fácil, estás expuesto constantemente a la opinión pública y la exigencia es muy grande, tienes una gran responsabilidad, pero desde el principio he intentado “normalizar” esta situación«.
«Yo se quien soy y cómo trabajo, he intentado dar siempre mi mejor versión y ayudar en todo lo posible al crecimiento del equipo y de la sección femenina como tal«.
«Es normal que haya críticas y respeto las opiniones externas, a veces, he sentido que no se le ha dado el valor que se merece a lo que hemos conseguido en tan poco tiempo. Pero como ya he dicho soy consciente de lo que es el Real Madrid y de todo lo que le rodea».
«Me quedo, sobre todo, con el apoyo que he recibido siempre por parte del club y con el reconocimiento y cariño del resto de entrenadores de la Primera Iberdrola«.
Hay que decir, que esta segunda temporada nada tiene que ver con la primera del Real Madrid. El Real Madrid comenzó su primer año de vida algo tímido, y con muchas dudas.
A diferencia de esta segunda temporada, que la directiva del equipo se ocupó de fichar a ocho jugadoras, muchas muy conocidas a nivel nacional, como Esther González, segunda máxima goleadora del pasado curso. O internacionales con Caroline Møller, o Méline Gerard.
Ya no sólo era que todas las jugadoras encajaran personalmente, sino que su juego también se complementara dentro del campo. Algo que costó mucho desde el principio, y sobre todo por todas las bajas que ha habido al arrancar este nuevo curso.
Mientras que el Real Madrid luchaba por clasificarse en la Women’s Champions League en los meses de agosto y septiembre del pasado año. También tuvieron que aforntar un comienzo de liga muy turbio en el que las hizo situarse en algunas jornadas últimas en tabla.
Muchos frentes abiertos, en lo que Aznar tuvo que lidiar. Y en los que muchas veces no se llegó a valoar todo el esfuerzo y tenacidad con el que el entrenador talaverano sobrellevaba esos momentos tan duros. En sus propias palabras Aznar nos trasmitió:
«Quizás las expectativas que no teníamos la temporada pasada nos han pasado factura en esta«.
«Volvemos a fichar a 8 jugadoras nuevas de mucho talento y todo hacía pensar que estaríamos en mejor situación que el año pasado, pero el fútbol no son matemáticas. Mejoramos mucho la plantilla, pero desgraciadamente las lesiones me han quitado la posibilidad de disfrutar de ella».
«Tuve la suerte de vivir un momento histórico que fue el poder eliminar al Manchester City en esa previa de Champions. Un equipo que llevaba un año sin perder en casa, donde nuevamente nadie apostaba por nosotras y conseguimos clasificarnos por primera vez para esa fase de grupos«.
«Fue el momento más bonito y especial de esta temporada. Sin embargo, no arrancamos bien en Liga y encadenamos varios partidos sin ganar«.
«Ha sido sin duda un momento complicado porque te alejas del objetivo en Liga y el Real Madrid es un Club que tiene que pelear por todo«.
«Aun así siempre estaré agradecido a las jugadoras que en ese momento estaban disponibles y lo dieron todo para revertir la situación. Cuando fuimos recuperando a las jugadoras empezamos a ser un equipo más estable en el resultado. Y creía que podríamos luchar por una plaza de Champions hasta el final«.
Hecho que en cierta parte es verdad, ya que la Women’s Champions League está en cuartos de final, y el Real Madrid sigue clasificado.
El 29 de noviembre del 2021 el Real Madrid hizo oficial un comunicado en el que informaba de la sustitución del míster David Aznar, sin muchas explicaciones, más que la vorágine de habladurías que se había hecho ya antes de su cambio.
Aznar nunca quiso rendirse, en su vocabulario no existe esa palabra, e incluso el entrenador castellanomanchego, en su opinión, cree que tenía fuerzas y ganas de seguir con el equipo adelante.
A pesar de que no estaba preparado para ese momento aún, el míster haciendo un recuerdo de ese momento, se lo toma con humor y saber estar:
«Bueno, uno nunca deja al Real Madrid, más bien el Real Madrid me dejó a mi (jajajaja)». «El Club decidió cambiar de entrenador«.
«Yo solo puedo decir que me veía con fuerzas y capacidad para revertir la situación. Pero respeto y entiendo perfectamente la decisión del club«.
«Los resultados no fueron los esperados y eso ha precipitado mi salida, pero siempre le estaré agradecido por el trato que me han dado en este tiempo. Guardo muy buenos recuerdos y me llevo grandes personas que he conocido allí».
Referente a su presente y futuro, desde que Aznar abandonó el banquillo vikingo no ha dejado de dar charlas y cursos como entrenador.
Él sabe que aún le queda mucho camino en el mundo del fútbol femenino. Espera que en un futuro no muy lejano, poder estar al frente de un equipo femenino. En sus propias palabras Aznar nos dijo:
«Seguir entrenando (jajajaja), me encanta mi trabajo. Ahora quiero aprovechar para descansar, coger energía y seguir mejorando detalles como entrenador pero me encantaría volver a los banquillos pronto con un proyecto bonito e ilusionante«.
«Creo que me quedan muchos años en este fútbol femenino y también tengo mis sueños y objetivos como entrenador que quiero cumplir«.
Y para finalizar esta gran entrevista al primer entrenador de la historia del Real Madrid femenino, me quedo con una frase que me dijo Aznar. Y que ejemplifica a la perfección lo grande que es este entrenador, y la pasión que el toledano tiene por su profesión
«Para mi el fútbol es mi vida y me quedan muchas cosas por vivir«.
Autora: Alicia Rodríguez
Fotografías: RRSS David Aznar