Millie Bright, con el único gol de la noche, le dio la victoria y los tres puntos al Chelsea en esta primera cita europea.
El PSG recibía a las blues en su casa. Ambiente de lujo, con una afición entregada, que se pasó los 90 minutos del encuentro animando sin cesar, pese a la pobre actuación de las suyas en el terreno de juego.
Primera victoria de las blues en casa de las parisinas. Aplicando la ley del mínimo esfuerzo, las blues sacaron rédito del gol de Bright y reservaron fuerzas para el resto de temporada.
PARIS SAINT-GERMAIN FC 0 – CHELSEA 1
No fue el mejor partido de esta jornada de Champions. Un PSG rácano en ideas perdió por la mínima contra un Chelsea que no necesitó hacer mucho más.
Prêcheur hacía tres cambios con respecto al once que jugó contra el Dijon en la pasada jornada de la D1 Arkema: Groenen, Diani y Bachmann salían como titulares en detrimento de Mengwen, Martens (baja por enfermedad de última hora) y Baltimore.
Por su parte, el Chelsea rotaba a tres jugadoras con respecto al partido anterior de la WSL contra el Everton. James, Fleming y Périsset se quedaban en la caseta para que Ingle, Mjelde y Charles arrancasen como titulares en esta primera cita europea de la temporada para las blues.
El partido arrancaba tranquilo, con ambos equipos tanteándose sin prisa en los primeros compases.
Sam Kerr fue la que dio el primer gran susto de la noche, poco antes de llegar al cuarto de hora del encuentro. La delantera, con un gran movimiento dentro del área, se abría espacio para disparar, pero Bouhaddi despejaba con los pies.
Cuthbert llegaba forzada al rechace, pero su disparo se iba muy alto.
Poco después, Harder metía un centro medido a la cabeza de Kerr. Bouhaddi anticipaba bien y se llevaba la bola con ella. El gol estaba al caer.
Sacaba Cuthbert de corner y el balón era rechazado por la defensa parisina. La escocesa reciclaba la jugada y volvía a meter el pase colgado, esta vez al segundo palo, donde Bright esperaba para anotar de volea, casi a bocajarro.
Millie Bright volvió a demostrar que la que tuvo, retuvo. La central inglesa empezó jugando como delantera en categorías inferiores y hay cosas que aún la delatan, como el movimiento que hizo para sacar a De Almeida del segundo palo y poder rematar con más facilidad.
El PSG no reaccionó tras el gol
La reacción de las parisinas tras el gol fue nula. El Chelsea las mareaba en el centro del campo y ellas no eran capaces de salir del segundo tercio.
Pernille Harder estaba siendo un auténtico dolor de cabeza para las centrocampistas del PSG, apareciendo una y otra vez donde hacía más daño. La danesa tiene la inteligencia de saber en todo momento dónde flaquea más el rival para usarlo en su propio beneficio o para generar espacios para que sus compañeras marquen la diferencia.
Tanto ella como Kerr se centraban en presionar, dejándose caer atrás para reducir el espacio de maniobra de las parisinas.
Con un espacio de juego reducido, Bachmann se dejaba caer en muchos momentos al centro, dejando al Chelsea en inferioridad en el centro del campo. Groenen, por su parte, trataba de salir todo el rato desde atrás, ocupando el rol atacante de Bachmann.
Las dos ex del Chelsea trataban de generar confusión entre la defensa y el centro de las blues, pero no supusieron mayor peligro para la zaga inglesa. El 4-4-2 del Chelsea se beneficiaba de los espacios que dejaba Bachmann, que las parisinas no lograban tapar.
A la hora de defender, el Chelsea replegaba y acercaba sus líneas. El PSG peloteaba frente a ellas a medida que avanzaba la primera mitad, sin ideas claras a la hora de afrontar la llegada al área.
El Chelsea puso el piloto automático
Jugando una primera parte bastante mediocre, las del Chelsea sacaban rédito del solitario gol de Millie Bright, que les daba la victoria al descanso. Sin muchas ideas en la construcción de juego, el peligro de las blues llegaba de errores del PSG o de jugadas a balón parado. Los balones colgados al área estaban siendo hasta ahora su mejor baza, como así se demostró en la jugada del gol.
El PSG por su parte aún no había demostrado nada sobre el verde. Por banda izquierda, las parisinas parecían llevar media marcha más que en el resto de campo, pero no estaban sabiendo aprovechar esto a su favor.
En esta segunda parte, Diani se posicionaba más al centro, cubriendo huecos y cambiando la estrategia del equipo, siendo ella la única amenaza que el PSG planteó al Chelsea en todo el encuentro. Bright y Buchanan se mostraban sólidas atrás, anticipándose a las llegadas y los pases de las francesas. No concedieron ni un centímetro de espacio a sus rivales.
Con Diani más central y Fazer yéndose más al centro, el PSG dejaba el carril izquierdo completamente olvidado. El único flanco que las parisinas estaban aprovechando en el encuentro. Si la intención era que Bachmann se fuese a ese carril, la jugadora suiza de momento estaba fallando en su cometido.
El PSG buscaba sobrecargar el centro del campo, con Diani jugando casi encima de las centrales y Bachmann en una posición más flotante. Fazer y Geyoro apoyaban en las combinaciones. A estas alturas del encuentro, el Chelsea estaba en modo ahorro de energía pensando en el partido de liga contra el Brighton y se limitaba a robar y subir a la contra.
Tres puntos y a otra cosa
Actuación muy pobre la del PSG, que jugó al juego que quiso el Chelsea. Las blues hicieron lo que tenían que hacer y, viendo que el rival no era ninguna amenaza, las dejaron jugar hasta cansarse. El PSG jugó con un ritmo lento, sin prisa: 61% de posesión de las parisinas y tan sólo un remate entre los tres palos en todo el partido.
Por el lado londinense, a destacar la figura de Erin Cuthbert, la mejor sin duda del partido. La centrocampista escocesa fue el motor de las blues y crucial en su victoria tras dar el pase de gol. Su intensidad durante los 90 minutos de juego redujo las llegadas de las anfitrionas, anulando cualquier amenaza en el ataque local.
Jugando como doble pivote junto a Sophie Ingle, otra de las destacadas de la noche, Cuthbert ayudó a estabilizar el juego del Chelsea. En ataque su distribución del juego fue clave en las llegadas del cuadro londinense, mientras que a nivel defensivo fue un buen apoyo para Bright y Buchanan, reduciendo las llegadas al área del PSG (6 disparos a puerta en todo el encuentro).
El gol de Millie Bright le dio la victoria (muy valiosa) al Chelsea en una noche sin drama ni emoción, pero llena de concentración, disciplina y organización por parte del equipo londinense.
La siguiente cita Champions será el próximo miércoles, 26 de octubre. El PSG se enfrentará al el Real Madrid, mientras que el Chelsea recibirá al Vllaznia albanés en casa.
FICHA DEL PARTIDO
PSG: Bouhaddi (P), Lawrence, De Almeida, Ilestedt, Karchaoui, Jean-François (Traore, min. 79), Groenen (Cascarino, min. 70), Fazer, Geyoro (C), Diani y Bachmann.
Entrenador: Gérard Prêcheur.
Chelsea: Berger (P), Eriksson (C), Buchanan, Bright, Mjelde, Ingle (Périsset, min. 90), Cuthbert, Charles, Reiten (Kaneryd, min. 77), Harder (Fleming, min. 77) y Kerr.
Entrenadora: Denise Redy.
Goles: 0-1 Bright (min. 27).
Árbitra: Ewa Augustyn.
Partido disputado en Stade Jean-Bouin (París).
Incidencias: Tarjeta amarilla a Buchanan (Chelsea, min. 16) y tarjeta amarilla a Ilestedt (PSG, min. 34).
Premio “Player of the Match”: Millie Bright.
Autora: Marga Martín
Fotografía: UEFA Women’s Champions League