En el día de ayer se volvió a saber de nuevos tratados que la liga femenina de nuestro país tendrá para esta temporada. Gracias al nuevo acuerdo que han llevado a cabo la Liga, y la LPFF.
La Liga anunció ayer que se hará de nuevo cargo de comercializar los patrocinios y acuerdos de la LPFF.
Y la cuantía esperada para cinco años será mínimo de unos 42 millones de euros, algo que comparada con la masculina es ínfimo.Y decimos que se volverá a hacer cargo, porque ya en el 2016 lo intentó.
La Liga vuelve al futbol femenino.
La Liga buscó lo que nuevamente quiere hacer esta temporada, pero entre el 2017 y 2019, Tebas declaró ver en peligro la existencia de fútbol femenino en nuestro país. E incluso tuvo varios comentarios que daban a entender que él era el primero que no ponía de su parte para que no funcionara.
Frases como: «No he visto la final de la Champions«. «No nos equivoquemos, el fútbol femenino nunca será como el masculino» (y no matizó). Y otra de sus míticas frases, cuando las futbolistas hicieron huelga para tener un mínimo de 16000 euros al año, que viene siendo a 1142 euros en 14 pagas. El Presidente de la Liga dio su opinión a esta huelga, diciendo lo siguiente. «Los escalones se suben de dos en dos, y no de cinco en cinco«.
Cuando el salario mínimo de un futbolista de Primera División es de 155.00 euros anuales, unos 11.071 euros en 14 pagas. Y también hay que decir que cobra por año 1,5 millones de euros al año, 94 veces más que el salario mínimo que se exige para su puesto.
Pero no sólo es una guerra porque Tebas decida el futuro del fútbol femenino, cada vez que tiene oportunidad. Si no también es la guerra abierta que tiene con la RFEF. No se ponen de acuerdo, ni siquiera cuando tenía que ser el sorteo del calendario. Y en vez de celebrarlo en conjunto, la RFEF lo celebró la semana pasada de una manera algo paradójica.
Hubo grandes críticas de que no hubiera representación de las jugadoras en el sorteo. Y tambien de que dos de las personas que sacaran las bolas para decidir el calendario de la liga española no fueran representantes de la LPFF. Como fueron el seleccionador de la Absoluta, Jorge Vilda, y el Presidente de la RFEF, Luis Rubiales.
Álvarez y Alcaine.
Donde también faltó en este sorteo, y está faltando en todas estas decisiones que se están tomando, la Presidenta de la Liga Profesional de Fútbol Femenino Beatriz Álvarez Mesa. Ni tampoco el vicepresidente Ruben Alcaine, que ante tantas problemáticas, ninguno de los dos se están pronunciando.
Recordemos que Beatriz Álvarez fue futbolista y entrenadora, además de Presidenta del Oviedo Moderno. Y que dejó el puesto de Directora General de Deportes del Principado de Asturias, para también formar parte actualmente del CSD.
Álvarez fue una de las personas que aprobó los estatutos que regirán la competición que va a dirigir esta temporada.
La llamada «Liga Ellas«, de las cuáles se firmaron unos compromisos con las jugadoras. Pero se han antepuesto las necesidades de la RFEF, y de la Liga, antes que las propias necesidades de las jugadoras de todas las categorías de nuestro país.
Alcaine, nuevo Vicepresidente de la LPFF, también ha sido Presidente de la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (ACFF) y directivo histórico del fútbol femenino español. Y la Junta Directiva se debía completar con representantes de cinco clubes de nuestro país, que debían haber sido elegidos el 7 de junio de este año.
Y a partir de entonces, la LPFF debería haber activado dos importantes procesos. Como son las negociaciones con los sindicatos para un nuevo convenio colectivo, y la venta de los derechos televisivos.
Obligando a traves de la nueva Ley Audiovisual que blindará el interés general de la nueva competición. Haciendo que al menos un partido por jornada de la LPFF debe emitirse en televisión en abierto.
El tratado del que se está hablando es que la LPFF le ha cedido a la Liga por un mínimo de 42 millones en cinco temporadas. Dándola poderes en estos cinco años, como el «tile sponsor» de la competivción. O el balón oficial, así como todo tipo de patrocinios y licencias de la competición.
Lo único que está claro, es que el fútbol femenino debería decidirse por el bien y a favor de las futbolistas y de su afición. Para nada debería regirse con medidas hechas dentro de un despacho, y a puerta cerrada. El consenso entre todas, y la representación real de las jugadoras en la liga harían que la profesionalización del fútbol femenino fuera real.
Autora: Alicia Rodríguez
Fotografía: AP