Y por fin llegó uno de los días más esperados por el público americano, y cada vez más por el público de todo el mundo, con la final de la Liga Americana. Una final a la que llegaba por segunda temporada consecutiva North Carolina, que ya había logrado el título la temporada anterior; enfrente iba a tener a una franquicia debutante en las finales de la Liga, las Chicago Red Stars que tenían en sus filas a la MVP de la temporada y Golden Boot, Sam Kerr. Pero, ¿sería suficiente ese argumento para hacer frente al gran potencial de la franquicia de las Courage?.
La casualidad ha querido que la Final de este año fuere la reedición del primer duelo de la temporada. Hace seis meses, el 13 de abril, North Carolina Courage y Chicago Red Stars pisaron el campo en el estadio Sahlen’s Stadium en el WakeMed Soccer Park para comenzar la temporada 2019 de la NWSL. Medio año, veintitrés partidos y una semifinal de playoffs más tarde, ambos clubes volvían a encontrarse una vez más para disputarse el título de esta temporada.
En la previa comparecieron ante los medios diferentes jugadoras de ambos equipos. «Ni siquiera pensé en cómo esto completa el círculo«, dijo la defensora de los Red Stars, Katie Naughton. Añadía como algo realmente destacable que «Es increíble que empecemos aquí y terminemos aquí, independientemente del resultado. North Carolina es un equipo de primer nivel; uno de los mejores del mundo, si no el mejor. Para competir contra ellos, tenemos que mostrar nuestros talentos como nos hemos esforzado por hacer y, en última instancia, ganar este partido. Será increíble y sé que todas estamos ansiosas por hacerlo «.
En los enfrentamientos directos habidos durante la temporada, empataron ambas franquicias en la jornada inaugural pero, desde entonces, Chicago ha conseguido imponerse en los dos enfrentamientos frente a North Carolina, habiendo impulsado a las Red Stars a finalmente superar el reto del playoff de semifinales donde habían quedado apeadas de forma consecutiva hasta en cuatro ocasiones en anteriores ediciones, consiguiendo finalmente a disputar su primera final y llegar a su primera final.
«Ni siquiera puedo expresar con palabras la sensación que tuvimos después de vencer a Portland el pasado fin de semana«, dijo la mediocampista de Chicago Nikki Stanton, «Este es el objetivo final para cada equipo, aquí es donde cada equipo quiere estar, y ahora estamos aquí. Para mí, es mi sexta temporada en la liga, la segunda con Chicago, y siempre he querido estar aquí. Es lo que a veces piensas que nunca llegarás, y ahora estamos aquí. Es una sensación increíble y todas estamos muy emocionadas«.
Para North Carolina, esto es lo de siempre: muchas de sus jugadoras afrontan la cuarta final consecutiva, en diferentes franquicias, iniciando su carrera por el título de Western New York Flash en 2016. Eso no significa de por sí que vayan a ganar el título, pero la experiencia siempre es un punto a tener a cuenta.
A ello se refirió precisamente la centrocampista de North Carolina, McCall Zerboni “Tenemos mucha experiencia, especialmente con este grupo«. La centrocampista, con una dilatada carrera en la Liga recordó que “esta es mi octava final en once años”, aunque quiso recordar, en referencia a sus rivales que “ellos también tienen mucha experiencia en diferentes etapas, en el escenario mundial. A veces es el día, quién es el mejor equipo del día, y eso es lo que hace que el fútbol sea parejo. Eso es lo que lo hace emocionante. Creo en mi equipo y tenemos una muy buena historia y reputación con esto ”.
Si bien su equipo ha tenido éxito en grandes momentos en el pasado, el entrenador de North Carolina, Paul Riley, sabe que la final no será una tarea fácil, «son un equipo peligroso con muchos atributos, gran entrenador, equipo bien organizado«. A ello añadió, recordando los enfrentamientos directos de esta temporada que «nos causan problemas cada año: no es un equipo contra el que tenemos un gran éxito, mira nuestra historia en contra de ellos«. Aprovechó para recordar algo en lo que ya hizo incidencia en el partido de semifinales, recordando la gran oportunidad que tenía frente a si “para nosotros, el personal y los jugadores, es un gran desafío lograrlo este fin de semana ante nuestra afición«.
En cuanto al partido en si, con las entradas vendidas y agotadas unos días antes del encuentro, se dieron cita 10.227 espectadores en el Sahlen’s Stadium para ver el partido en directo y millones de espectadores a través de la retransmisión televisiva. Era, además, el partido señalado para darle la despedida merecida a un icono de la Liga Americana, la centrocampista Heather O’Really, que se retiraba después de 17 temporadas en la Elite.
El partido tuvo dos momentos claves en el primer tiempo que ayudaron a que North Carolina repitiera como campeonas de la NWSL. Con algunos espectadores aún camino de sus asientos y aún con los prolegómenos de la final en la mente de muchos, llegaría el primer tanto para la franquicia de las Courage. En un ataque muy rápido en el que participó el tridente temible de ataque de North Carolina, Lynn Williams condujo velozmente a zona de tres cuartos, cediendo el balón para la incursión por banda de Jessica McDonald que centró fuerte al segundo palo por donde llegaba Debinha, que remató de primeras y después de un par de rechaces de la zaga y de Naeher, conseguía conectar el disparo correcto para alojar el esférico en el interior de la portería de Chicago.
Con la confianza del gol, las Courage, que si ya eran favoritas en la previa del partido, fueron imponiendo su ley en el partido merced a su gran potencial ofensivo, y es que sus jugadoras de ataque estaban desatadas conscientes que al igual que en la semifinal tenían que generar mucho para intentar resolver el encuentro lo antes posible, y más aún con su rival que contaba con la calidad de la máxima goleadora de la competición, Sam Kerr. Así llegaron las ocasiones de forma continua de Lynn Williams, Jessica McDonald, Debinha y Crystal Dunn, pero el excelente trabajo de la zaga para taponar sus disparos y de Naeher para evitar encajar más goles estaba surtiendo efectos y mantenían al equipo vivo en el partido, permitiendo además que aunque fuera esporádico, Kerr tuvo en sus botas el empate pero no consiguió igualar en el electrónico.
Pero antes de la media hora de juego, llegaría el segundo para North Carolina. Nuevamente Lynn Williams conseguía deshacerse de su par en la banda derecha y consiguió centrar un balón medido al segundo palo para que apareciera allí Jessica McDonald para conectar un excelente cabezazo cruzado que superaba a Naeher que solo podía que mirar como el balón pasaba por delante suyo y acababa nuevamente alojado en la red de las Red Stars.
El segundo tanto llevó a despertar por fin a Chicago, que empezó a ver que si no empezaba a buscar la portería contraria evitando de paso las acometidas de North Carolina no habría final para el segundo tiempo. Empezó a estirar sus líneas y fruto de ello, y de un cierto relajamiento de las Courage con el marcador conseguido en esos momentos, llegaron los acercamientos de Chicago buscando reducir las distancias en el marcador. Tanto Sam Kerr, como Savannah McCaskill y Brian tuvieron en sus botas el acercar a Chicago en el marcador.
Pero justo antes de encaminar el camino a los vestuarios para el descanso, llegaría el segundo momento clave del partido. Mewis conducía hasta la frontal, buscando a Debinha en profundidad, la brasileña ponía el balón atrás donde recibía Crystal Dunn que inicialmente parecía perder el balón, pero la falta de contundencia se la zaga le permitía recuperar el esférico y, con Naeher por los suelos y la defensa descolocada, conseguía conectar un disparo que superaba a las defensora para acabar significando la sentencia definitiva al encuentro, dejando el segundo tiempo para puro trámite. Y ello a pesar de los esfuerzos de Chicago, que incluso antes del descanso pudo haber marcado a través de DiBernardo pero Labbe se mantuvo firme.
La segunda parte siguió por el mismo cauce que el primer acto, aunque las ocasiones también llegaron del lado de Chicago que ya nada tenía que perder, y además su estrella, Sam Kerr, buscaba conseguir su gol y dejar su huella en la final a nivel individual ya una vez clara que su equipo no tenía ya posibilidades reales de triunfo. Llegaría además el cuarto gol para North Carolina cuando Samantha Mewis, al poco de cumplirse el cuarto de hora del segundo tiempo, se anticipaba a toda la zaga de Chicago para superar a Naeher y llevar el júbilo a la hinchada local que tenía media hora por delante para celebrar de forma anticipada la victoria de su equipo que estaba aplastando al cuadro rival.
En los últimos minutos de partido, ambos conjuntos intentaron aprovechar la relajación general, consecuencia de un marcador tan claro, para seguir ofreciendo espectáculo para los aficionados que no habían querido perderse la final, y no se vieron más goles bien por el acierto de las cancerberas y esfuerzos de las zagas, y en ocasiones también por la falta de acierto a la hora de dirigir correctamente los disparos a portería.
Quedará para el recuerdo la facilidad y claridad con la que North Carolina consigue revalidar su título de Liga, esperando a ver que puede deparar la temporada que viene para ambas franquicias. También quedará para la posteridad que la brasileña Debinha fue nombrada la MVP de la Final.
Ficha técnica:
North Carolina Courage: Stephanie Labbe, Jaelene Hinkle, Abby Erceg, Abby Dahlkemper, Heather O’Really (Cari Roccaro 89’), Denise O’Sullivan, Samantha Mewis, Debinha, Crystal Dunn (McCall Zerboni 62’), Lynn Williams, Jessica McDonald (Kristen Hamilton 75’).
Chicago Red Stars: Alyssa Naeher, Sarah Gorden, Julie Ertz, Casey Short, Kathleen Naughton, Danielle Colaprico (Brooke Elby 84’), Morgan Brian, Yuki Nagasato, Vanessa DiBernardo (Nikki Stanton 75’), Savannah McCaskill (Katlyn Johnson 46’) y Sam Kerr.
Goles: 1-0 Debinha 4’, 2-0 Jessica McDonald 26’, 3-0 Crystal Dunn 45+5’,4-0 Samantha Mewis 61’.
For club and country. An incredible career for @HeatherOReilly.
Enjoy the next chapter you legend! pic.twitter.com/aaKqyzcWy0
— U.S. Soccer WNT (@USWNT) October 27, 2019
Autor: Enric Solé Altarriba
Fotografía: